Un sistema de riego automatizado no solo conserva agua, sino que también puede mejorar significativamente la productividad del rancho. Estudios han demostrado que la implementación de riego inteligente puede adelantar la cosecha hasta un mes y aumentar los rendimientos de los cultivos (MDPI).

Estos sistemas reducen la evaporación y la escorrentía, permitiendo una utilización más eficiente del agua y promoviendo una agricultura más sostenible. Además, la capacidad de controlar el riego con precisión ayuda a mantener la salud del suelo y a prevenir la erosión y la salinización, lo que es crucial para la sostenibilidad a largo plazo de las tierras agrícolas.